Reseña: Compañías Silenciosas - Laura Purcell
Elsie es una joven viuda de orígenes humildes que abandona Londres para mudarse a Fayford, un pueblo que acumula pobreza y supersticiones por partes iguales, junto a la prima de su marido, Sarah.
Cuando llegan a The Bridge, así se llama la casa, está muy lejos de las expectativas de Elsie. Ésta está vieja, medio caída, con humedades y llena de polvo. La decadencia de la casa se suma al clima lluvioso de esas tierras y a la tristeza de la protagonista.
Un día aburridas Elsie y Sarah deciden investigar su nuevo hogar, hasta llegar a la buhardilla, donde encontrarán los diarios de una antepasada de Sarah, Anne Bainbridge, esta fue acusada de brujería y es una de las razones por la cual los aldeanos no quieren aproximarse a la casa ni trabajar en esta, aunque sus condiciones sean precarias. Y es que parece ser, que en esa casa la muerte es una invitada más. Pero los diarios no son lo único que encontrarán, junto a estos parece haber una colección de tallas de madera que desde la lejanía podrían hacerse pasar por una criatura de carne y hueso. A Elsie no le dan demasiado buena espina, pero Sarah parece encantada con la idea de bajarlas al salón, estas preciosas piezas de madera reciben el nombre de compañías silenciosas...
Desde ese momento, la vida en la casa cambiará de forma drástica, habitaciones que modificarán su aspecto, aparición de serrín y astillas acompañadas de extrañas marcas, ruidos aparentemente inexplicables, mensajes y desafortunados accidentes.
¿Qué es lo que pasó en The Bridge para que la casa siga maldita tantos años después?
Este libro está dividido en tres líneas temporales: La primera que sería la actualidad de Elsie, len a cual no sabemos por qué está en el Hospital St Joseph. La segunda trascurre entre 1865-1866 que es cuando tiene lugar los acontecimientos de la historia principal del libro y la que transcurre en 1635, donde conocemos a Anne Bainbridge y a su hija, la pequeña Hetta a través de los diarios.
Este juego entre las líneas temporales, recurso que la autora controla a la perfección, es la que te hace estar enganchado hasta la última página del libro, viendo como las fichas se mueven (nunca mejor dicho) por el tablero a través de los diferentes tiempos. Y además, siempre con un final de capítulo que te incita a continuar con la lectura, aunque es cierto, que en algunos momentos el ritmo de esta puede hacerse un tanto lento.
Uno de los puntos fuertes del libro, junto al citado anteriormente, es la ambientación gótica que logra recrear Laura Purcell, ya no solo por las descripciones de los espacios, sino por la capacidad de hacer de la casa una protagonista más. Para mí, requisito indispensable en este tipo de novelas o historias.
Y hablando de protagonistas, creo que esta novela como buena novela gótica, tiene dos lecturas de lo acontecido.
Tanto Hatte, como Anne, Sarah y Elise, son víctimas de ser mujeres. Bien
son acusadas de brujas por tener conocimientos sobre remedios naturales, bien
no tienen ningún tipo de autoridad sobre ellas mismas, o bien son relegadas a ser la
mera compañía de alguien. Muchas de las crisis nerviosas que sufre una de
las protagonistas son asociadas a “la línea femenina. Histeria pasada; de útero
a útero”.
De hecho, uno de los personajes masculinos Joylon, hermano pequeño de Elise,
comenzará a sacar su ego y autoridad masculina a medida que la situación se
vaya agravando en la casa, ordenando que sea medicada o encerrada en su habitación
si esta lo requiere. Ese fragmento del libro, debo confesar que me puso de los nervios.
El personaje de Elsie, es un personaje con el que cuesta empatizar al principio de la novela, parece un tanto frívola, en ocasiones da la sensación que le da más pena dejar Londres que el hecho de que su marido esté de cuerpo presente, pero es que el pasado de Elsie, es tan oscuro como el de la propia casa y su futuro no parece ser mucho mejor.
Se nota que esta novela bebe de historias como Jane Eyre de Charlotte Brontë, Cumbres borrascosas de Emily Brontë, pero sobre todo de Otra vuelta de Tuerca de Henry James, ya que al final del libro puedes creer a la protagonista o bien quedarte con la opinión de su médico donde dice que todo lo sucedido es una forma de sobrellevar los traumas con los que carga a su espalda.
El libro me ha gustado mucho, ha cumplido las expectativas que puse sobre él allá en 2018. Es cierto que me hubiese gustado algún susto más hacia el final, pero hay que reconocerle a la autora que, hasta la última línea de la última página, mantiene el misterio de la casa y sus habitantes.
Una novela gótica, con lo mejor de este género, entretenida y llena de misterio.
Espero que después de esta reseña decidáis adentraros en The Bridge y dejaros
acoger por las compañías silenciosas…
Valoración: 4.5/5
★★★★ 1/2
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