Los Chicos De La Nickel - Colson Whitehead
Los Chicos De La Nickel
Hoy os traigo un libro que tenía
muchísimas ganas de leer todo y que sabía que era una lectura dura, de esas que
deja posos y los personajes pasan a formar parte de ti.
Ese libro no es otro que el
premio Pulitzer 2020 Los chicos de la Nickel de Colson Whitehead, autor de El
ferrocarril subterráneo también premiado con el Pulitzer en 2017.
Los chicos de la Nickel es un
libro necesario, sobre todo en los tiempos en los que nos encontramos. Donde la
violencia policial está en aumento, donde nos creemos que ciertos movimientos
antirracistas son cosa de un día y no de una vida luchando por: Unos derechos,
ser tratados como personas y tener las mismas oportunidades que los demás.
Nos encontramos en un momento
donde señalar el racismo en cualquiera de sus facetas te pone en el punto de
mira haciendo que aún recibas más insultos por ello, convirtiéndote bajo el
poco criterio de algunos en un OFENDIDITO.
Creo que es muy importante y
necesario conocer la historia, saber de dónde venimos, pero sobre todo saber
dónde no queremos volver. Por ello, Los chicos de la Nickel nos ayuda a
entender la situación que se vive a día de hoy en Estados Unidos, ya que viene
del mismo problema de siempre: El racismo.
¡Empecemos!
Nos encontramos en Estados Unidos
en plena segregación racial. Elwood es un joven afroamericano que vive en
FrenchTown (Tallahassee) junto
con su abuela, la cual lleva cuidándolo desde que sus padres se marcharan sin
mirar atrás buscando un futuro mejor.
Su abuela se preocupa mucho por
él, no quiere que se meta en líos, por eso se lo lleva con ella al hotel donde
trabaja. Elwood comenzará a vivir de primera mano lo que la gente realmente
espera de él y lo difícil que puede ser el mundo para una persona negra.
Elwood es introvertido, listo,
trabajador y adora pasar horas escuchando los discursos de Martin Luther King
jr. Es un joven que se preocupa tanto por su futuro como por el futuro de los
afroamericanos, está seguro de que un día la segregación y la violencia que se
ejercen sobre los cuerpos negros será cosa del pasado.
Su sueño es poder estudiar con
libros nuevos que no contengan insultos racistas e ir a la universidad, el
primero en su familia en poder plantearse el hecho de ir. Pero por desgracia su
país le recordará que por muchos sueños que tenga sigue siendo un muchacho
negro en Estados Unidos.
Elwood ingresa en la escuela
Nickel. A simple vista no hay nada que le llame la atención, no tiene verjas,
nada que detenga a los jóvenes que se encuentran ahí, pero eso solo a simple
vista.
La Nickel es una escuela
segregada donde por lo tanto, los alumnos negros y blancos deben mantenerse
separados. Por mucho que ese lugar se haga llamar escuela y presuma de su
efectividad, los alumnos no aprenden nada, básicamente porque su educación no
es ni mucho menos su prioridad. En las horas de clases la mayoría de alumnos
duermen o se entretienen con lo que pueden.
Los chicos están ahí como mano de
obra para mantener la escuela y realizar trabajos para esta.
Nuestro protagonista poco a poco
será consciente del lugar donde está y descubrirá que los delitos que han
cometido algunos de sus compañeros no son ni mucho menos tan graves como
imaginaba. Algunos han cometido pequeños hurtos, otros han consumido sustancias
y otros han tenido que aguantar ser violados por sus progenitores o ser
abandonados por estos.
La mayoría de chicos que están
ahí no tienen a nadie que se preocupen por ellos o por lo que les pueda pasar.
Un extraño ruido asoma en la
escuela por la noche, los más veteranos lo llaman hacerte un “helado”. El Wood descubrirá su significado cuando
trate de detener una pelea y lo castiguen de tal manera que se pase una semana
en la enfermería, una fortuna porque muchos no suelen visitarla.
La Nickel es un lugar corrompido donde
en cada esquina espera un nuevo peligro y donde solo se pueden salir de tres
maneras: Muerto, corriendo o graduado (si es que podemos llamarlo así).
Bajo este escenario conocerá a
Turner, un joven que ya lleva tiempo en la Nickel, que se las sabe todas y que
es pragmático. Ambos personajes se complementarán y nos regalarán una de las
amistades más duras y bonitas que pueda recordar.
La historia de los chicos de la
Nickel pone los pelos de punta, jamás me hubiera imaginado encontrar semejantes
atrocidades entre estas páginas. Supongo que porque jamás se me hubiera
ocurrido que una “persona” pudiera infligir semejante violencia sobre unos
niños.
El lugar que nos presenta es una
clara muestra del racismo institucional. No tan solo te hacen la vida imposible
en ese lugar, sino que además no tienes medios ni opciones para salir adelante
fuera de él, lo que te llevará de nuevo a la Nickel o a la cárcel (si eres
mayor de edad), o incluso puede que te mueras de una sobredosis o que decidas
alistarte en el ejército para morir por un país donde ni si quiera tienes
derechos porque para ellos no eres una persona.
Pero aun así ante esa oscuridad
nos encontramos la luminosidad de los discursos de Martin Luther King jr., el
cual es un personaje más de la historia (nos encontraremos diversos discursos
suyos), ya que es el mayor referente del joven Elwood. Discursos en los que
dice que por mucho odio que reciba él dará amor, que por muchas veces que lo
encarcelen él dará amor, que por muchas veces que él sufra violencia él dará
amor... Sin embargo fue asesinado.
¿Se puede dar amor a alguien que
te odia por tu color de piel? ¿Qué te odia desde el mismo momento en que eres concebido?
El personaje de Elwood me ha
parecido maravilloso: un joven con sueños, que es fiel a sí mismo, a sus
ideales y aquello en lo que cree hasta en los momentos más complicados. Incluso
en momentos en que no tiene sentido aquello en lo que crees.
Y qué decir de Turner, ese chico
que es capaz de sobrevivir en las peores condiciones, de ingerir jabón para
darse unos días de descanso, consciente del sitio en el que está y, de por
desgracia, del papel que tiene en él.
Los personajes están muy bien construidos.
Pero no solo los protagonistas, también los secundarios. Harriet la abuela de Elwood, señora
maravillosa y de armas tomar que cuenta con una vida muy dura a su espalda.
Todos sus familiares la han ido dejando poco a poco sola y todo por culpa del
racismo y de la segregación racial.
Otro personaje que también
marcará en destino de Elwood es el profesor Harris, el que nos demuestra una
vez más lo importante que son los referentes.
Este es el primer libro que tengo el placer de leer de Colson Whitehead (está claro que no será el último), y me he quedado absolutamente enamorada, no sé si estoy siendo demasiado objetiva, pero qué diablos he comprado el libro y soy de fiar (gracias a la editorial por este ejemplar…es broma).
Me ha asombrado la forma directa
en la que expresa las cosas, no se anda con rodeos, introduce historias y datos
de forma correcta y haciendo que mantengas el interés en lo que te está
contando. No hay nada que esté de más en el libro. Para mí es una historia
absolutamente redonda.
He leído alguna reseña con cierto
tufo a racismo donde decían que costaba adentrarse en la historia y que
resultaba difícil empatizar con los personajes…El único motivo por el que les
cuesta empatizar con los personajes es porque tienen más melanina que ellos.
Pueden empatizar con un gato, con
ponys de colores, con un Dios nórdico de tupida melena, pero nunca y bajo
ninguna circunstancia, podrán empatizar con un negro. Es un clásico.
Para mí, obviamente, ha sido todo
lo contrario.
Una historia dura que ha
conseguido emocionarme en más de una ocasión y que sin duda ha removido
demasiados sentimientos dejándome un nudo en la garganta. Me leí todo un
capítulo con la mano en la boca.
Es el primer libro que me deja en
este estado de “¿y ahora qué?”.
Me ha hecho pensar “¿Cuántos
Elwood y Turner ha habido y cuantos estamos dispuestos a que haya?”
Espero que le deis una
oportunidad a este libro inspirador, que nos muestra que el racismo no es solo
que te insulten por la calle. El racismo
también es tener más probabilidades de terminar en un correccional o en la
prisión solo por tu color de piel sin haber cometido ningún delito. Que tengas
más probabilidades de ser agredido en esta y vivir en unas condiciones
deplorables o que simplemente ni entres en ella porque has muerto bajo la rodilla
de un policía.
Este libro debería hacernos
reflexionar sobre la importancia de invertir en educación, porque la solución a
muchos problemas pasa por ella.
Colson Whitehead nos llevará a
los inicios de la segregación racial para mostrarnos los paralelismos que aún
conservamos de esta.
Como último dato me gustaría
añadir que la historia ante la que nos encontramos, si bien tiene parte de
ficción, está basada en hechos reales.
En 2014 se realizaron
excavaciones en La escuela Arthur G. Dozier (1900-2011) en Florida tras
detectar anomalías en el terreno. Dicha excavación sacó a la luz 55 cadáveres
de alumnos y con ellos todas las aberraciones a los que eran sometidos. Se
sospecha que desaparecieron alrededor de 180 niños.
Los escenarios que aparecen en el
libro son reales al igual que los métodos de castigo.
Lo dicho, espero que querías
conocer la historia de Los chicos de la Nickel.
Saludos y nos leemos
Valoración: 5/5
⭐⭐⭐⭐⭐
Frases:
"Hay personas que te engañan, que te entregan vacío con una sonrisa en los labios, mientras que otras te roban tu amor propio.
"Debes recordar quien eres."
"La justicia en la Nickel era cosa de cara o cruz."
"No sabes por qué la gente se porta como se porta."
"Que el mundo se convertía en una turba: él la atravesará. Tal vez les escupan y le insulten y le peguen, pero él conseguirá llegar hasta el otro lado. Jadeante y ensangrentado , pero logrará pasar.
"Nos tratan como infrahumanos en nuestro propio país. Siempre ha sido así. Y tal vez lo será siempre."
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